Cuando era pequeña, mi madre me daba siempre este consejo para defenderme: “Si alguien se te pone frente a ti y quiere hacerte algo, le das una patada en los “h…os” y sales corriendo”, me lo repitió en varias etapas de mi vida, lo cual se quedó en mi inconsciente. Ya un poco más grande, mientras manejaba, un tipo se subió a mi coche para secuestrarme. Al ver que el señor estaba logrando su cometido, mi sistema nervioso autónomo entro al juego, pues algunos de mis sentidos se desconectaron, deje de escuchar la música que había en ese momento, no sentía nada, ni la temperatura, y en este momento hago consciente que el sentido del olfato estaba nulo también. Lo único que tenía en mente era salvarme, así que mi sistema nervioso simpático se puso en total alerta, vino a mi cabeza, esa frase que me decía mi madre y mi mente y mi cuerpo median todo con gran exactitud, preparándose para huir. La realidad es, que no sé cómo fue pero era el momento perfecto para escapar, pellizcando al tipo (donde me dijo mi madre), logré que él me soltara y esa fue mi oportunidad. Salte del carro y escapé, sin darme cuenta de nada, totalmente en un estado de shock. Al llegar al otro lado de la calle, me abrace de un señor y fue cuando mi sistema nervioso parasimpático se hizo presente, me sentí a salvo, me sentí protegida y ayudada. Mientras pasaba más el tiempo y me calmaba mucho más, note que yo estaba totalmente golpeada, rasguñada y llena de sangre, fue curioso pues mientras estaba en el auto jamás sentí nada, solo estaba buscando el modo de salir de ahí. Esto es una pequeña muestra de cómo el sistema nervioso es fundamental para el funcionamiento del ser humano, dando una comunicación especial en todo nuestro cuerpo para crear una consciencia de lo que realmente somos.
Cecilia Domínguez Zesati /G36

Desde pequeños nuestros padres y la propia vida nos preparan para situaciones en riesgo, las memorias de momentos traumáticos, nuestro subconsciente nos recuerdan sonidos o caras o solo la circunstancia, hace algunos años salía a bailar constantemente con amigas, una de esas veces nos percatamos que unos chicos guapísimos nos veían contantemente, ya pasada la noche nos mandaron unas copas a la mesa las cuales dudamos en tomarlas ya que pues siempre hubo un tema de recuerdo, que mis padres me decían no tomes nada que no veas que te sirvan jaja como es real y como tienen razón no las aceptamos y después fue uno de ellos a invitarme nuevamente una copa muy insistente le dije que le agradecía mucho pero no, se molestó y volvió a insistir, mi sistema de defensa se alertó al ver su reacción me llego una cantidad de información que he recopilado a lo largo de mi vida para producir una respuesta inmediata de defensa, mi consciente se negó a pesar de que era muy muy guapo, después de un rato vi que salían con otras chicas ya del salón..
Hoy siendo más consiente es saber elegir bien y reaccionar a situaciones que nos pueden poner en peligro.
Patty Villeda G36