Inicio Foros Foro de la materia 05: biopsicología G44 Biopsicología

Viendo 15 entradas - de la 16 a la 30 (de un total de 40)
  • Autor
    Entradas
  • #181548

    tengo una familia grande de 11 hermanos, siempre estuvo presente mi mama lo mas que podia pero muy ausente mi papa el casi no estaba en casa y cuando llegaba a casa mi mama nos hacia callar para que no hagamos ruido y le daba toda la atencion a el y nos mandaba a la pieza asi el comia y miraba la tele tranquilo ,eso me costo mucho a mi asimilarlo xq siempre fui callada y trataba de no molestar a mi entorno y que me quieran parte de sus grupos o hacer lo que me decian por miedo al rechazo, hoy en dia vivo con mi marido y mis 2 hijos y al principio hacia lo mismo que me mi mama que no alla ruido pero despues entendi que estaba copiando lo mismo que ella y me hice conciente de esa situacion que hoy en dia ya no me afecta en mi hogar.
    Hoy en dia entendi que ese trauma que vivi de chica me costo bastante salir adelante ,no tener verguenza hablar en publico ,hoy en dia soy reservada con mis cosas y mi entorno es chico.

    #181569
    smiriamcp@gmail.com
    Participante

    Desde pequeña, asumi un rol que no me correspondía por completo. Soy la hija mayor de tres hermanos, y durante algunas horas al día, tenía la responsabilidad de cuidarlos. Aunque era solo por un rato, ese tiempo bastó para ver y sentir el mundo con una responsabilidad muy grande.
    Sin darme cuenta (inconcientemente) creci con la necesidad de ayudar a los demás. Ese impulso por cuidar, por estar disponible, por contener, se volvió parte de mi identidad. Ayudar me daba un sentido de valor, de pertenencia. Y así, con los años, comenze a rodearme de personas que necesitaban apoyo emocional. Me sentía atraída por quienes estaban rotos, o se sentian solos.
    Pero con el tiempo, esa forma de vivir no me cuadraba y me metia en muchos lios . En terapia, finalmente pude ver con claridad algo que antes no comprendía: no era mi deber salvar a nadie. Comprendi que cada persona toma, a su tiempo, las herramientas que necesita para crecer, y que mi constante impulso por rescatar era también una forma de evadir mi propio dolor.
    Aquel descubrimiento me liberó. Aprendi a poner límites, a acompañar sin cargar, a amar sin anularme. Deje de buscar relaciones desequilibradas y comenze a relacionarme desde un lugar más sano, más consciente.

    #181610

    CARLOS ALEJANDRO MONROY AVILES
    GENERACION: 44

    En relación a la pregunta, puedo manifestar que hoy puedo compartir que tengo aún con vida a mi Papá, mas sin embargo mi Papá fue muy violento y en casa todos mis hermanos (8) teníamos mucho miedo, ya que los regaños y castigos y hasta golpes fueron muy agresivos. Esto para mí en mi niñez, justo a los 7 años, cuando ingreso a la primaria, desde el primer día me tengo que enfrentar al buling, así que me tuve que defender….no tenía otra opción.

    Toda la primaria, me tuve que pelear para defenderme y defender a otros amigos. Posteriormente, cuando ingreso a la secundaria, estando en el 2° año, mi Papá va a mi firma de boleta de fin de curso y me regaña, porque a él no le gustaron mis calificaciones, y en ese momento le pido a él, que ya no vaya a firmar mis boletas, que mejor vaya mi Mamá….él se enojó conmigo y me dice nunca más me va a decir de mis calificaciones y que de ahora en adelante Yo tenía que ser responsable de mis estudios…..y así fue….termine la secundaria, ingrese al bachillerato y posteriormente a la Universidad…tiempo después….terminé mi Posgrado.
    En mi inconsciente, Yo estaba enojado con mi Papá, pues no me ayudaba, en el negocio familiar (comercio) empecé a trabajar a los 13 años, comencé los fines de semana, y después todos los días, trabajaba en la mañana y estudiaba en la tarde.
    Hoy en conciencia, agradezco tanto a mi Papá y lo honro, porque de la forma que me trato y fue conmigo, hoy soy independiente, tengo garantía en mi palabra, en mis decisiones y mi carácter y sobre todo….gracias a su semilla, hoy estoy aquí…. desarrollando un Diplomado….Hoy comprendo que mi Papa no medio lo que Yo quería o anhelaba, porque, a él tampoco se lo dieron sus padres, y él no podía dar lo que no tenía…. mi Papá en esta vida solo está repitiendo. Hoy soy la persona que soy, porque comprendo a mi Papá y dejé de criticarlo, hoy estoy en amor con mi Papá….

    #181611

    Cuando era niño no tenía mucho apoyo por parte de mi familia en estudiar y sacaba notas muy bajas. Un día mi hermana mayor al darse cuenta de mis notas me enseñó a sumar, multiplicar y dividir; producto de ello saqué buenas notas, y poco a poco fuí creyéndome que soy inteligente y seguí haciendo crecer esa idea; y hoy por hoy me siento capaz y muy inteligente de resolver algúin problema.
    Ventajas:
    – Soy muy dedicado cuendo estudio y me abastraigo bastante para aprender
    Desventajas:
    – Tiendo a sobrepensar
    Hoy, esta red neuronal me ha hecho eficiente y cauteloso, pero también me frena y me genera ansiedad porque tiendo a sobrepensar.

    #181661

    Soy la mayor de los hijos que tuvieron mi papá y mamá, cuando ello se separaron me tocó trabajar desde muy pequeña y ayudar con la limpieza de casa, cuidar a hermanos y hacer de comer, ahora que estoy por cumplir 36 años me cuesta trabajo aceptar ayuda y no quedó conforme en cómo las personas realizan las cosas y derepente quiero hacer yo todo.
    En mi niña de 5 6 años se desarrollo la red neuronal de poder hacer todo sin ayuda y ahora me cuesta trabajo aceptarla y quedar conforme en cómo las personas realizan las cosas.

    #181663

    Creo que la mayoría de mis decisiones de adulto tienen que ver con la RED NEURONAL que desarrollé en mi infancia. Mi Papá por cuestiones de trabajo (trabajaba fuera de la ciudad) estuvo ausente en parte de mi infancia y en mi adolescencia; mi mamá sufrió de alcoholismo por lo que creo que maduré chica y me hice muy introvertida, no me gustaba invitar amigas a mi casa y me hice un poco invisible e insegura, aunque ahora tengo muchas amigas, no me involucro mucho, prefiero el anonimato, soy poco participativa en clases o eventos (como lo habrás notado) y me cuesta expresar mis sentimientos, como nos decías en clase, si vemos que el expresar no da resultados (porque mis padres eran así) prefería no demostrar emociones, esto me ha ocasionado problemas en mis relaciones.
    Sin embargo soy una persona muy trabajadora, responsable y honesta (cualidades de mis padres), pero muy dependiente de mi esposo (por la misma ausencia de mi papá), me cuesta mucho soltar y también cambiar mis rutinas.
    La muerte de mi papá me costó mucho trabajo superarla porque quedaron muchas cosas pendientes con él.
    Ahora reconozco y he superado muchas cosas, sin embargo hay otras que aún reconociéndolas no logro cambiarlas.
    Definitivamente la RED NEURONAL que desarrollamos en nuestra infancia y adolescencia marca nuestra vida adulta.

    #181693

    MarthaGriffin G44 estudiante DG44M3916
    Hola,Buenas tardes
    En base a la primer pregunta; hoy me doy cuenta que tenia muchisimo miedo al abandono. Este terror se manifesto cada 5 a~os a lo largo de mi vida. Cada que sufria un abandono por parte de mis parejas yo sufria tremendamente; lloraba amares, sentia un hueco en el centro de mi cuerpo
    me dolia todo mi ser, me sentia muy triste, para mi erainjusto y me preguntaba una y mil veces; Por que? No entiendo!!
    Estas memorias guardadas en mi inconsciente, donde yo no las podia ver, no tenian forma, no tenian nombre, ni lugar, ni tiempo; solo lo sentia mi cuerpo, no podia explicarlo, pensaba que era algo malo que me pasaba y que asi era y punto. Para protejerme decidi ya no intentar, una
    decision tomada desde mi lobulo frontal.
    Con lo que entiendo ahora por lo que he estudiado, se que estas memorias a largo plazo guardadas en mi son las que provocaban ese miedo
    a la relacion. Un trabajo marabilloso que hace el hipocampo guardar estas memorias como codigos, es la razon por la cual no se entienden si no se ven de cerca.
    Cada vez que yo tenia una pareja, se activaba mi amigdala gritando «Cudado, peligro!!!! Todavia no entiendo que es lo que yo hice para que
    se fueran, pero estoy en el proceso, estoy estudiando, aqui sigo.
    Gracias Maestra Laura, por enriquecer mis conocimientos.
    Le deseo lo mejor.

    #181707

    En mi caso, soy la pequeña de 3 hermanos y casi nunca podía decidir sobre nada. Y en ese entonces no me parecía un problema, era lo que había y me acostumbré a que los demás tomaran decisiones por mí. Empecé a crecer y no sabía tomar decisiones, todo me daba igual, era la duda constante, que debería pensar, hacer y sentir y cuando me obligaban a decidir me tensaba mucho porque no sabía ni lo que quería ni lo que era mejor para mí. Durante mucho tiempo me sentí perdida, sin saber que camino escoger, desde lo más simple hasta lo más trascendental. Eso que me hacía sentir tantas dudas, se volvió un aprendizaje, me volví muy independiente, y no permitía que nadie de mi círculo más cercano me cuestionara. Yo tomaba mis decisiones, y me hacía responsable de cada una.
    Ahora me doy cuenta que era una red neuronal de adaptación al entorno, el caso es que me fui de extremo a extremo, de dejar que cualquiera decidiera por mi, y que todo me diera igual, a ser muy independiente y trazar una linea en la que nadie me dañará ni se metiera en mi vida. En este momento busco un equilibrio, aunque en ciertos momentos sigo sintiéndome como esa niña que necesita que los demás le marquen el camino, y a veces todavía me siento invadida e invalidada, entiendo que me queda mucho por aprender sobre mi misma, mis emociones y sobre como canalizarlas para desde la serenidad, escuchar a los demás y tomar mis propias decisiones.

    #181710

    cuando era niña mis papas se iban a trabajar a una tienda de abarrotes que teniamos, nos dejaban a mi hermana y a mi en la casa de mis abuelos. Yo recuerdo pasarla mal y sentir mucha angustia, me quedaba sentada esperandolos y siempre bien portada. Cuando me casé resulta que el esposo que tuve siempre se iba a trabajar y estaba yo con esta situación de estar a la espera, muchas veces sintiendo angustia y nunca hice algun tipo de problema o conflicto, siempre portandome bien. No estoy segura de si lo que estoy expresando es una red neuronal, pero me «acostumbre» de cierta manera a ser «comprensiva y esperar, sintiendo ese abandono»- Ahora a mis 46 años me he dado cuenta que el tema de abandono es una constante que siento en mi y ese sentir que debo comprender y esperar. Ahora he ido sanando estando en conciencia pero me es complicado. Espero no estar diciendo una tontería.

    #181718

    Soy la 3a de 5 hermanos, fui la más pequeña, por varios años, me sentia muy consentida y cuidada, hasta que llegaron mis 2 hermanos menores (despues de 10 y 11 años) percibí más atenciones, cuidados hacia ellos, inclusive me enojaba que me pidieran que los cuidara, me decía, porque debo cuidarlos, no son mis hijos, en la etapa escolar los enviaron a escuelas particulares y los demás hnos, a escuelas publicas, y seguía esa molestia por ese privilegio para ellos, inclusive al terminar la preparatoria, no ingrese a la Universidad, mi Papá me dijo, o estudias o trabajas de niña bonita no te quiero, me enojaba y me decía, debería pagarme la Universidad. Con la red neuronal, que desarrolle con el tiempo, fui comprendiendo, que lo que mi Padre hizo, fue un acto de amor, ya que a través de lo que estudie, hoy puedo pagarme la carrera de biodesprogramacion, gracias a esa carrera, pude adquirir una casa y vivo de forma independiente, aprendí a llevar una mejor relación con mis hnos y ver lo bendecida que soy, de contar, con su cariño y apoyo. Mi Padre ya trascendió hace varios años, y agradezco su gran amor, aunque en aquel entonces no lograba verlo. También agradezco a mi Madre, sus cuidados y cariño. Gracias Laura por permitirme externar y darme cuenta, de ltodo lo que si he tenido.. G44 3935

    #181722

    A mis 25 años fui diagnosticada con artritis reumatoide, el dolor de mis articulaciones y deformación de los dedos de las manos era fuerte y me imposibilitaba el movimiento y la fuerza, en los pies empecé a sentir dolor en los dedos también y por las mañanas sobre todo me impedían caminar bien, tomaba medicamentos que aliviaban el dolor pero que estaban dañando mi estómago.
    Comprendí que esto me sucedía porque inconscientemente lo que hacía era querer defenderme de agresiones que no reconocía, años después cuando pude reconocerlo el dolor fue desapareciendo, dejé el medicamento mis dedos se enderezaron considerablemente.
    Hoy a mis 70 años no tengo dolor en mis articulaciones y en los análisis de laboratorio ninguno rastro de esta enfermedad. Hasta ahora comprendo que nadie me hizo nada, que yo misma me lo hice con lo que otros hacían

    #181723

    Soy hija del medio y desde pequeña viví con un papá muy agresivo, especialmente conmigo. Nunca me sentí protegida por nadie, ni siquiera por mi mamá, porque ella también le tenía miedo. A mi hermano menor siempre lo consintieron, y eso me hacía sentir aún más sola e ignorada.

    Eso me llevó a desarrollar una red neuronal basada en el miedo: aprendí a callarme, a no molestar, a evitar cualquier cosa que pudiera detonar su enojo. Me sirvió para sobrevivir, pero también me hizo muy insegura y con dificultad para poner límites.

    Con el tiempo, eso cambió. Hoy ya no me callo como antes. De hecho, ahora me enojo más fácilmente, porque ya no tolero lo que antes aguantaba. A veces exploto, y aunque estoy aprendiendo a manejarlo mejor, siento que mi cuerpo ya no quiere seguir reprimiendo lo que durante años guardé.

    Reconocer esta red neuronal me ha ayudado a entender mis reacciones y a trabajar en nuevas formas de responder, con más fuerza, pero también con más conciencia.

    #181725

    Mis padres se separaron cuando yo tenía 12 años y mi mamá me utilizo como confidente de las inconformidades de su relación; compartiéndome situaciones que como niña no las comprendía generé un resentimiento a mi padre que al paso de unos años superé cuando el enfermo de cancer al mismo tiempo que volvió a casa. Cuando él murió yo tenía 21 años y fue a partir de ese momento que adopte un papel de mayor responsabilidad, así como el apego a mi madre y prácticamente su cómplice para la toma de decisiones de casa. Posteriormente al sufrir un accidente automovilístico, mi madre tuvo discapacidad y la responsabilidad creció más estando yo prácticamente al frente de todo. Al día de hoy tengo una relación de pareja no al 100%, no quise tener hijos y vivo con culpa y miedo, mismos que no demuestro y soy quien resuelve o soluciona los contratiempos.

    #181730

    Yo perdí a mamá cuando tenía 5 años, mi hermana mayor 8 y papá 29. Vivíamos en casa de mi abuelo materno y papá tomó la decisión de irse con nosotras dos para casa de sus padres. El cambio fue muy fuerte para nosotras por qué veníamos de vivir en un hogar lleno de mucho amor y al mudarnos a casa de los padres de papá fue demasiado fuerte. Mi familia paterna tenía muchos conflictos entre sus hermanos, habían muchas discusiones y en ciertas ocasiones nos sentíamos mi hermana y yo desprotegidas .Despues papá se casa y mi madrastra me golpeaba hasta 3 veces al día y me decía que yo no iba a servir para nada. Esas situaciones me llevaron a defenderme no solo a mi, sino a defender también a mi hermana mayor. A veces y desde entonces si me siento agredida ,me defiendo, no me quedo callada. He sido la mediadora en mi familia cuando alguna situación difícil se presenta . Pero recuerdo haberme sentido siempre sola, aunque estuviera rodeada de personas. Busco soluciones rápidas a situaciones difíciles y no caigo en la tristeza o desesperación. Eso sí, papá siempre ha estado muy presente en nuestra vida hasta el día de hoy. El a sido nuestro apoyo incondicional.

    #181740

    En mi caso, crecí con un padre muy agresivo. Desde pequeña aprendí a mantenerme callada y a no causar problemas, porque sentía que todo lo que hacía podía generar un conflicto. Nunca me sentí protegida por nadie, ni siquiera por mi mamá, porque también le tenía miedo. Ver cómo a mi hermano menor lo trataban con más cariño me hacía sentir que yo no valía lo mismo.

    Con el tiempo, mi cuerpo y mi mente se acostumbraron a aguantar. Se formó una red neuronal que me hacía quedarme callada, no enojarme, no pedir nada. Pero eso cambió. Ahora me enojo con más facilidad, y aunque a veces siento que reacciono de más, también entiendo que por fin estoy expresando lo que antes no.

    Esta red neuronal que antes me ayudó a sobrevivir hoy me está enseñando otra cosa: que tengo derecho a decir lo que pienso, a poner límites y a sentirme segura. Ya no soy la misma, y aunque sigo trabajando en sanar, hoy sé que mi voz merece ser escuchada.

Viendo 15 entradas - de la 16 a la 30 (de un total de 40)
  • Debes estar registrado para responder a este debate.
error:
Scroll al inicio