Yadira Aidee Delgado Rangel
Generación 33
N. DY1237

Es muy interesante ver cómo es que ambos hemisferios están conectados pero teniendo muy claro (en condiciones normales, es decir sin cirugía) qué es lo que le corresponde a cada uno, imaginé que pasaría si ambos hemisferios captaran lo mismo se reduciría considerablemente nuestra capacidad de percibir todo lo que nos rodea aunque en apariencia no seamos conscientes de ello, es como cuando aprendes a manejar y llega un momento en que aparentemente ya no prestas atención a los controles y solo vas pendiente de tu entorno (a veces ni tan pendiente…) y tú crees que no eres consciente pero hay una parte de nosotros (un lado del cerebro) que si está pendiente ¿cuál domina? Ninguno, ambos están haciendo lo que corresponde, claro que con el estímulo y aprendizaje constante de nuevas habilidades se van creando nuevas conexiones neuronales y se logra estimular el comportamiento o control de ambos hemisferios de manera consciente, como cuando era pequeña tomé clases de piano y era maravilloso tocarlo, pero recuerdo que ya de grande quise retomarlo ¡y no había manera de coordinar mis manos! y tal vez he ahí lo que el cerebro y nuestro inconsciente “sabe” que es necesario conservar y lo que no, lo que vimos en clase de “la poda sináptica” creo mis clases de piano se fueron por ahí… quizá mi cerebro sabía que no necesitaba esa información para futuras etapas de vida alimentando por alguna información almacenada en el subconsciente? o quizá sólo fue falta de práctica y estímulo para seguir puliendo la habilidad? Manejar es algo que disfruto enormemente pero lo practico a diario y en diferentes condiciones, es algo que creo tengo muy dominado y hay algo en mi interior que “sabe” que estoy consciente o inconscientemente pendiente de todo detalle del carro y del entorno, son mis hemisferios haciendo su trabajo y en conjunto divirtiéndome? o es la práctica constante lo que refuerza la conexión neuronal? Tal vez no lleguemos a comprender la súper maravilla que es el cerebro y ponerle palabras pero sí creo que si confiamos en él y le damos el “alimento” necesario en lo que corresponde a nuestros intereses se volverá una máquina aceitada funcionando en nuestro favor.