Buenas tardes, mi nombre es Mariana González y esta es mi aportación al foro.
La enfermedad ha sido considerada durante muchas generaciones como un castigo, algo casual o de mala suerte y e le ha dado al paradigma de la ciencia el poder de decidir lo que sabemos y lo que no sabemos, y este es uno de los motivos por los que el general de la población sigue poniendo su salud en manos de externos, médicos, científico y «expertos» de casi cualquier cosa. Sin embargo en mi profesión como fisioterapeuta el paciente es visto como un ser de varias esferas que aunque necesita únicamente tratamiento físico aparentemente, la realidad es que existen muchos factores que intervienen tanto en su problemática como en la solución de la misma. Entre estos factores el estrés, la depresión y la ansiedad son los que he visto que generan mayor dificultad en la sanación. Al estudiar las leyes de Hamer aprendo a ver la enfermedad como un proceso que aunque ocurrió en el pasado esta manifestándose en el presente, es una situación en la que el paciente invierte mucha energía mental, emocional y a veces física, por lo que su cerebro responde a estas «sugestiones» que el paciente se auto aplica, ordenando acciones biológicas que se representan como enfermedad. Conozco de otros estudios el poder de la mente subconsciente y simplemente uniendo ese conocimiento con las leyes de Hamer he logrado entender como generamos nuestras enfermedades que no son otra cosa más que «el mal» que impulsa el cambio, la incomodidad de la vida para que nos movamos, nos desarrollemos y nos superemos como seres conscientes, autoconscientes, humanos mas humanos y menos automáticos: más conscientes. Y mi comprensión más bella es entender que la enfermedad es también un método divino para que nos desarrollemos como seres completos a través del servicio a los demás.