Para mi la honestidad es importante, más vale una verdad que duela que una mentira que prolongue la agonía. Para ser honesto también hay que utilizar la empatía, una cosa es ser honesto y otra agresor,
La intención es lo más importante, si lo que se va decir es desde el amor propio y/o a la otra persona (para no lastimar, engañar, por respeto, por congruencia con uno mismo y empatía hacia los demás) o desde el egoísmo (para dañar, hacer sentir mal, sin empatía, con crueldad). Si la intención es afectar emocionalmente de forma intencional con dolo entonces para mi no es honestidad, es crueldad; si la intención es por respeto, amor, empatía, eso para mi es honestidad y hacerlo de forma asertiva, aún cuando duela, con responsabilidad afectiva.