El fundamento del coaching no indaga el pasado como lo hace la psicoterapia o la biodesprogramación, el coaching arranca desde el presente al futuro. Partiendo del conflicto presente, busca motivar al paciente a clarificar creencias limitantes si las hubiera, evaluar o modificar si es necesario la perspectiva, el enfoque, desde donde observamos el conflicto, especificar metas claras, específicas, medibles, realistas, etc., motivando a llevar a cabo un plan de acción. Y donde también se observa el diálogo interno que se mantiene en el consultante.