La relación entre el individuo, su familia y las drogas es que dependiendo de las carencias que haya tenido la persona en las primeras etapas de su vida, en su círculo familiar más cercano -primordialmente con el padre y la madre-, es lo que va a hacer a que el individuo vaya a buscar lo que le hizo falta afuera. El que no se cubran esos aspectos que dan seguridad y confianza así como la falta de estímulos que generen placer -como un abrazo, un reconocimiento, etc.- es lo que hace que a la persona le gusten tanto las drogas, las cuales sí le dan esas sensaciones y que al final es por lo que él/ella se vuelve adicto. Las drogas lo que están haciendo es darle lo que no tuvo, por eso son tan adictivas porque llenan los vacíos que hubieron en casa.
Y la familia tiene todo que ver con las adicciones, porque para empezar el adicto lo es porque él/ella está reflejando justo las carencias y problemas que hay o hubieron en casa. Y también porque se supone que la familia es quien ama, protege, contiene, da seguridad y da el sentido de pertenencia a un individuo, pero si eso no lo puede obtener de la familia, entonces la persona tiene la necesidad de ir a buscar otro lugar a donde sí pueda pertenecer y con lo que sí se pueda sentir bien.