Respuestas de foro creadas

Viendo 3 entradas - de la 1 a la 3 (de un total de 3)
  • Autor
    Entradas
  • Gracias, Osmy, por la apertura del tema.

    Las programaciones han hecho de esta humanidad una masa de inconsciente colectivo fácil de manejar; donde tener un mundo pletórico de juicios sin sentido alguno y carentes de toda congruencia nos hace un blanco perfecto de la manipulación de la ciencia, la religión, la política y la economía sobre nuestras mentes y vidas; en este sentido, los paradigmas imperantes que nos hacen ignorar la libertad que tenemos de elegir lo que deseamos en nuestras vidas son precisamente los sistemas ideales que nos mantienen dormidos de conciencia.

    Es verdad que esta nueva era nos da un punto clave para el despertar de conciencia, donde es importante recalcar que todo conocimiento está más cerca y a nuestro alcance, no por nada empezaron a salir a la luz muchas técnicas, terapias, sistemas alternativos de sanación para las personas, luego entonces, ¿a quién le interesa que no despertemos y seamos inconscientes de este libre arbitrio que nos corresponde? Es aquí donde empieza el tema, pues es sabido que muchas son las manifestaciones de que todo el conocimiento que existe para sanarnos “está bajo la custodia de alguien más y que debo comprarlo (traducido en “medicina”), que por cierto no es más que conocimiento adulterado de malas intenciones, ofrecido por la ciencia como medicina alópata. Dicho lo anterior, quienes se benefician que la información no se haga pública es el gran imperio farmacéutico, ya que pierden “ratings”, clientes y por ende dinero, asimismo al gremio de los médicos alópatas, a quienes fabrican y venden instrumentos médicos, etcétera.

    Myriam Frías Jiménez
    DM1323 G36

    “Palabra de Dios” y “científicamente comprobado” tan solo son frases que albergan los paradigmas (creencias) de que todo está resuelto, y que no queda nada que pueda transformar nuestras vidas, pues la religión y la ciencia han limitado nuestro libre arbitrio en la desprogramación de las afectaciones que impactan psicológica y físicamente al ser humano.

    Las clases de Osmy han empezado a despertar nuestro interés por el correcto empleo del verbo, observar cómo (programación) decimos y desde dónde (emoción) lo decimos para generar nuestra realidad; el buen decir (bendecir), tiene la gran relevancia de lo que manifestamos dentro y fuera de nosotros; y para ello el tema esencial que nos ocupa es el estrés vivido en situaciones muy específicas, también llamado bioshock, que es la afectación repentina a nuestras emociones, donde este impacto biológico representa una amenaza a nuestra supervivencia, y trae consigo ciertas características que provocan el desarrollo de enfermedades, llamadas también en Biodesprogramación “adaptaciones”, a saber: la característica de lo dramático (excesivo, sobrecogedor) que provoca un impacto en mi torrente sanguíneo y paraliza generando en el interior alteraciones químicas, asimismo debe ser un acto inesperado (que tal vez internamente se espera por LEY DE ATRACCIÓN), algo que conscientemente no tenía en el radar; la tercer característica vivido en soledad, refiriéndose a que ante una identificación del evento externo con procesado en el mundo interno, hay una correlación de procesamiento en posible asimilación de lo ocurrido, y entre el diálogo interno y el mundo de las ideas se vive desde los presupuestos individuales y esto es el equivalente a “no decirlo o expresarlo”; y por último la característica de sin solución aparente, donde quizá la angustia y desesperación ofrece la inseguridad en lo ocurrido y esto nos da un escenario sin salida del conflicto.

    ¡Gracias, Osmy por la energía de tu trabajo, millones de gracias por elegir coincidir con tod@s nosot@s!

    MYRIAM FRÍAS JIMÉNEZ G36
    DM1323

    Pitágoras dijo que si a los niños se les educa en el amor y la conciencia de lo que son, no habría necesidad de castigar a los hombres en su edad adulta. Con esta máxima inicio mi participación; creo que la energía de nuestra sociedad actual en cuanto a relaciones con otros seres (llámese humanos, animales y/o naturaleza) y acciones sobre nuestro entorno sería menos complicado. Entiendo que es todo es correcto y perfecto porque el Universo no tiene errores de origen, y atendiendo a la Ley de los opuestos, todo es equilibrio, donde oscuridad y luz existen la una en perfecta relación con la otra; pero ¿Qué hay de nuestro libre arbitrio para mantenernos equilibrados y sobre todo en amor con nosotros y con los demás? Es ahí donde somos 100% responsables de lo que elegimos e influimos en nuestro entorno (Ley de causa y efecto). Me parece que parte de la evolución y/o involución social que vivamos cada día con menos o más amor (Ley de causa y efecto, Ley de Ritmo), con menos conciencia (Ley de Vibración, Ley de Mentalismo), con menos comprensión de lo que somos (Ley de Polaridad), nos conduce a la autodestrucción, ya que nuestras creencias que somos mejores o superiores a nuestro entorno nos hace vulnerables a enfermedades físicas y enfermedades vibracionales; y ello nos lleva a situarnos en un mundo pletórico de errores en el que cuando avanza el tiempo va retrocediendo nuestra conciencia, y por ende el impacto ambiental, la misma relación con nuestras mascotas etcétera.
    Las decisiones inconvenientes que tomamos, solo deterioran nuestro ser y nuestro amor propio apagando la luz de nuestra conciencia personal y por ende la conciencia social.
    Si la niñez se alimentara de la sabiduría de las Siete Leyes Universales, no solo nuestra sociedad estaría vibrando en armonía, paz y conciencia sino que también tendríamos un mundo vibrando en la fragancia del amor y como resultado la SALUD FÍSICA y MENTAL en toda la faz de la Tierra.

    Myriam Frías Jiménez G36.

Viendo 3 entradas - de la 1 a la 3 (de un total de 3)
error:
Scroll al inicio